miércoles, 27 de agosto de 2025

CLARENCE F. HIRSHFELD


   
C
uando en febrero de 2014 escribimos la primera entrada sobre los tranvías denominados PCC, buscamos por todas partes una fotografía del jefe del equipo técnico del “Electric Railway Presidents' Conference Committee”, Mr. Clarence F. Hirshfeld, sin ningún éxito en la exploración.
Ya lo habíamos olvidado, cuando en una lectura de la revista Electric Railway Journal concretamente la publicada en octubre de 1931, y en el artículoImproving the Street Car” una fotografía suya lo antecedía.
Esto nos ha motivado a ir entrelazando datos y a poder conocer a una de las personas que con su trabajo, más ha influido en la mejora del transporte de superficie, durante el siglo XX.

Clarence Floyd Hirshfeld 

Nació en San Francisco de California el 30 de enero de 1881. Hijo de Charles Hirshfeld, un emigrante alemán nacido en Schrimm el año 1856, y Lotta McCarthy, nacida en Maine el año 1854.

Su formación técnica se inició en la Universidad de California, donde en 1902 se licenció en ingeniería eléctrica. Sus estudios continuarían en la Universidad de Cornell en Ithaca, New York, donde obtuvo la licenciatura en ingeniería mecánica.

Allí trabajó como docente en varios cargos entre ellos, el de profesor de ingeniería mecánica. En aquel periodo se casa con Elizabeth Bishop, con quien tuvo dos hijos John Winslow Hirshfeld, en 1908 y James Floyd Hirshfeld en 1912.
Aquel fue un fértil periodo creativo, estableció una consultoría técnica y en 1912, en colaboración con William Nichols Barnard, publican "Elements of heat-power engineering", un completo y extenso tratado de termodinámica.

Incorporación a la industria.

Hirshfeld 1922

Su formación electromecánica le conduciría al sector de la energía y en 1913, Hirshfeld dejó la Universidad de Cornell, trasladándose a Detroit, Michigan, para incorporarse a la Detroit Edison Company, donde fue nombrado jefe del departamento de investigación.

Durante la Primera Guerra Mundial, sirvió en el Departamento de Artillería de los Estados Unidos con los rangos de mayor y teniente coronel.

A su regreso a Detroit, trabajó en una gran variedad de campos, especializándose en el diseño, construcción, operación y mantenimiento de centrales eléctricas de vapor y también en la operación e interconexión de sistemas eléctricos; eliminación de residuos industriales; estudio del deterioro de cables eléctricos; soldadura eléctrica; desarrollo de hornos eléctricos y nuevos métodos para el desarrollo la electricidad.

Sede de la Detroit Edison Company en 1923.

Este gran conocimiento del sector eléctrico pronto le llevará al mundo del transporte.


Hirshfel y el Electric Railway Presidents' Conference Committee. 

Al comenzar los años veinte, el transporte de superficie iniciaba un estancamiento. La industria del tranvía en particular se había vuelto conservadora y poco creativa ante un nuevo competidor de gran ingenio, como entonces era la industria del automóvil.

Lo que en 1928 se consideraba moderno.

La industria tranviaria, agrupada en la American Electric Railway Engineering Association AEREA, pronto sería consciente de ello y en 1926 comenzó un proceso de búsqueda de soluciones a esta situación su primer paso fue la creación del Electric Railway Presidents' Conference Committee ERPCC, organismo que debía investigar soluciones para el sector del transporte eléctrico ferroviario.

Su director, Thomas Conway Jr. tras unos primeros años de trabajos, contactaría con Clarence F. Hirshfeld quien en la convención del AEREA, celebrada en San Francisco en enero de 1931, fue nombrado ingeniero jefe del ERPCC.

La mentalidad analítica de Hirshfeld cambia radicalmente la forma de trabajo del ERPPC. Inició un estudio de todos los factores que inciden en el transporte tranviario, profundizando en los problemas reales del transporte y en consecuencia dando con soluciones prácticas y nuevas. Entre ellas, la construcción de un modelo de tranvía totalmente alejado de los cánones de la industria ferroviaria que imperaban entonces.

Aunque el ERPPC estaba formado por fabricantes y operadores tranviarios, Hirshfeld no dudó en buscar proveedores de otros sectores si era necesario, un ejemplo de ello fue el optar por la empresa de automoción industrial Clark Equipment Co. en la construcción del bogíe B2, con un excelente resultado.
Fragmento de una publicación de Clark Equipment Co.

El ERPPC, tras cinco años de trabajo, presentó en la convención de la industria del transporte de 1934 de Cleveland, cuatro prototipos de tranvía. Uno construido por Brill, (coche 7001); otro por Twin Coach (5200) y dos por Pullman, (coches 4001 y 5300). Este último, denominado PCC B, fue el primer vehículo propiamente considerado PCC car. 

Los cuatro prototipos de 1934:  Twin Coach  5200,  Brill 7001, Pullman 4001 y Pullman 5300 PCC-B

En 1936 se suministraron 211 unidades de tranvías PCC, 100 de ellos a Brooklyn. Y en 1938, poco antes de su fallecimiento, el número de coches PCC en circulación era de 791.

El 7 de junio de 1932, la Universidad de Detroit le concede el grado de Doctor honoris causapor haber liderado un movimiento para liberalizar y humanizar la profesión de ingeniería al promover en ella no solo los conocimientos y habilidades técnicas más elevados sino también una amplia cultura general y un sentido de responsabilidad social y cívica”.

El trabajo en el sector del transporte le ocupó sus nueve últimos años, falleciendo el 19 de abril de 1939 a los 58 años en Detroit, aunque sería enterrado en East Lawn Cemetery, East Ithaca, NY. 
La Asociación Americana de Sociedades de Ingeniería, le concedió póstumamente la Medalla John Fritz en 1940.
Todavía en 1941 se registraba una de sus patentes: N.º de serie 155,598: SISTEMA DE FRENADO
Patentado el 27 de mayo de 1941. Autores: Lebert E. Blue, Nueva York, N. Y.Ingeniero de la Pullman-Standard Manufactring Car Co. y Clarence F. Hirshfeld, Detroit, Míchigan, cedentes a The Transit Research Corporation, Nueva York, N. Y., una corporación de Nueva York. Solicitud del 26 de julio de 1937,


Hirshfeld lideró todo el proceso de diseño y creación de los tranvías PCC desde su inicio hasta el suministro de las primeras series.

No llegaría a ver el espectacular resultado de los trabajos de su grupo, que renovó completamente el concepto de tranvía. Esta renovación no afectaría únicamente a EE. UU. donde se llegaría a construir cerca de 5,000 unidades, sino a todo el mundo, donde entre tranvías fabricados con su licencia en Italia y Países Bajos, y otros sin ella en países del Este, se llegaría a construir más de veinte mil tranvías PCC.

Tranvía PCC de la Haya, en 2024 durante la celebración de su 75 aniversario (1949-2024)


domingo, 17 de agosto de 2025

Un tranvía en el museo Ford de Dearborn.

 


  
  En 2010 publicamos esta foto de un tranvía de tracción animal saliendo de una cochera como muestra de enganche en limonera, es decir, con un solo caballo.

No le dimos más importancia a la foto, tampoco conocíamos su fecha ni procedencia.

El paso del tiempo va colocando las cosas en su verdadero lugar, y hace unos días buscando documentación para una nueva entrada sobre herraduras, dimos con un interesante artículo, que además estaba ilustrado con la misma foto.

Resultaba que la foto correspondía a la cesión de un coche tranviario al Ford Museum, de Dearborn, Michigan. Además, quien guiaba el tranvía era nada menos que Henry Ford, uno de los padres de la automoción e impulsor de la racionalización de la producción industrial.

Henry Ford, además, impulsó uno de los primeros museos de ciencia y tecnología, como veremos en la traducción del artículo publicado en Electric Railway Journal, el 5 de mayo de 1928.

El tranvía más antiguo fue entregado a Henry Ford.

En una ceremonia bastante inusual, el 8 de mayo, H. Hobart Porter, presidente del "Brooklyn City Railroad", entregó a Henry Ford, para su exhibición en su museo de Dearborn, Michigan, el coche de tracción animal más antiguo de su tipo que existe.

Tras una exhaustiva búsqueda por parte de los agentes del Sr. Ford, se eligió el de Brooklyn. Este coche, conocido en su época como "Jigger", es un modelo para un solo caballo y entró en servicio originalmente en 1868.

Durante veinte años, el vagón operó en la línea transversal del "Brooklyn City Railroad", desde Hunters' Point, Long Island City, hasta Erie Basin, en el sur de Brooklyn. En 1888, el coche fue retirado de esta línea principal y reemplazado por otro de dos caballos. El tranvía original se puso en servicio en una ruta desde Hunters' Point hasta el Ferry de la Calle 34, al pie de la Avenida Borden. Aquí, bajo la dirección de Michael O'Connor, fallecido hace tiempo, operó hasta 1897, cuando se eliminó esta ruta. El vagón fue construido por la Jones Car Company, de West Troy, Nueva York. 

Un detalle interesante de la ceremonia del 8 de mayo fue que el mayoral a cargo del tranvía era James P. Gregory, quien entró al servicio del "Brooklyn City Railroad" en 1884. Trabajó durante mucho tiempo como conductor de tranvías de tracción animal y, con la electrificación, se convirtió en "motorman". Continúa trabajando para la compañía en la línea de la Avenida Flatbush.

H. Hobart Porter, presidente del ferrocarril, al presentar el antiguo vehículo al Sr. Ford, dijo:

En 1853, en los inicios del transporte público, los ciudadanos de Brooklyn organizaron el Ferrocarril de la Ciudad de Brooklyn para que pudieran disfrutar de este entonces moderno medio de transporte. Los fondos para esta compañía se obtuvieron mediante la venta a domicilio de sus acciones con un valor nominal de10$ por 10$ en efectivo. Durante los 75 años transcurridos desde entonces, el "Brooklyn City Railroad" nunca ha estado en quiebra ni se ha reorganizado, y muchos de los propietarios actuales de sus acciones son descendientes directos de los compradores originales. Durante estos tres cuartos de siglo, la administración del "Brooklyn City Railroad" se ha limitado a esforzarse por servir al público y, creo, cuenta con un historial envidiable en este aspecto.

He oído decir, Sr. Ford, que usted fue el hombre que hizo de caminar un placer, y yo, que tengo una memoria prodigiosa y viví algunos años en el siglo pasado, siempre he discrepado de esa afirmación. Mucho antes del nacimiento del Modelo "T", existía un vehículo que hacía que caminar, correr o incluso nadar fuera un placer. Ahí está ese vehículo, el viejo coche de caballos. Cumplió una función útil y fue reemplazado. Es un testigo mudo de otra época.
Para concluir, afirmó que, dado que el Sr. Ford había hecho más que cualquier otra persona para modernizar los medios de transporte del mundo, era apropiado que esta reliquia bien conservada del transporte público urbano le fuera confiada, y en nombre del "Brooklyn City Railroad" y de los habitantes de Brooklyn, le entregó el vagón para su museo. (...)

El coche fabricado por J.M. Jones' Sons en La Henry Ford, Foto de John Smatlak


El museo Ford en Dearborn.

Lo que Henry Ford inició como una colección particular de artículos cotidianos pronto se convertiría en su "American Village Museum". En 1929 se inauguró lo que hoy se conoce como el Henry Ford "Museum of American Innovation and Greenfield Village". Se trata de un conjunto de edificios diseñados por el arquitecto Robert O. Derrick, ocupando una superficie de 48,600 metros cuadrados. Se construyó, según el estilo popular americano vigente en la época, y utiliza mármol criollo de Georgia, pulido con arena, como revestimiento. 

En su origen se constituyó como fundación Edison, y era de carácter privado. En 1933, se abrió al público, siendo en la actualidad uno de los mayores centros museísticos estadounidenses.

Hoy puede en él admirarse nuestro tranvía junto a un Birney y otro tranvía eléctrico de Cleveland.


J. M. JONES' SONS.

El tranvía que adquirió Henry Ford para su colección fue fabricado por J.M. Jones' Sons hacia 1870. Esta firma de carroceros y guarnicioneros, estaba situada en Circle Street, al norte de Berlin Street. Su fundador, John M. Jones, junto con Henry W. Witbeck, inició su carrera con el nombre de Witbeck & Jones, en 1839, fabricando  carruajes y vagones, en un edificio de madera, en aquel emplazamiento.

Durante los primeros años de la minería de oro en California, la empresa fabricó y envió una gran cantidad de madera y carruajes desde Nueva York a San Francisco, teniendo que circunvalar toda América, pasando el Cabo de Hornos.



En 1863 Henry W. Witbeck deja la sociedad y en 1864, J. M. y Richard W. Jones fundaron la empresa Jones & Co. e iniciarían la construcción de coches tranviarios. Tras un paro en el negocio desde 1879 a 1882, John H. y Walter A. Jones reanudaron en West Troy la fabricación de tranvías, construyendo miles de ellos para diferentes compañías de Estados Unidos, Sudamérica, Australia, Inglaterra, Alemania, India y otros países lejanos. En 1870, se fabricaron doscientos para la Bombay Tramway Co. En 1897, la empresa fabricaba unos 300 tranvías al año y ocupaba a cerca de 200 personas.

El "Brooklyn City Railroad".

El Ferrocarril de la Ciudad de Brooklyn (BCRR) se constituyó el 17 de diciembre de 1853. Su primera línea, la de la Avenida Myrtle,  estaba operada con coches de tracción animal en Brooklyn y se inauguró el 3 de julio de 1854. La compañía poseía en 1893 seis líneas tranviarias en Brooklyn, llegando a gestionar veintisiete en 1897.

La línea iba desde el embarcadero del Ferry de Fulton, pasando por la calle Fulton y la Avenida Myrtle, hasta las antiguas cocheras de diligencias en la Avenida Marcy. Tras la electrificación, la línea continuó en activo hasta 1930.

Aún hoy en Brooklyn quedan antiguos raíles testimoniando el paso de los tranvías en sus calles.