martes, 30 de octubre de 2018

Los carreteros, más madera...



  Hace ya unos años cuando Sebastià hacía su TREC, tuvimos la oportunidad de visitar algunos museos relacionados con los carruajes. El “Museu de Carros y Eines del Camp” en Valls, fue uno de ellos.

Este Museo, es una institución privada, fruto de la labor de búsqueda del Sr. Rogeli Muntalà, un esfuerzo muy considerable y que está permitiendo conservar un patrimonio que difícilmente podríamos disponer de otro modo.
Disfrutamos en su día de la visita, que además fue muy provechosa para el trabajo de ferradures.
La  guía y otras publicaciones del Museo fueron un buen documento para sistematizar algunas partes del trabajo.
Escogemos el inicio del capítulo dedicado a los carreteros para iniciar esta entrada.

El oficio de carretero estaba directamente relacionado con el mundo del transporte animal y con el oficio de herrero. Era quien construía los carros, un oficio fundamental para el transporte y el trabajo en el mundo rural. 
Eran los carreteros junto con los herreros, quienes hacían el carro de labrador, el carro de “trabuc” (volquete) y las tartanas.
   
Lo primero que se tiene que decir es que de carreteros había tantos como herreros, y solían estar uno junto a otro, porque se necesitaban. 
En Valls, había entorno seis carreteros y ocho herreros desde principio del siglo XX hasta la década de 1960 aproximadamente.
Los buenos carreteros utilizaban madera de primera calidad: el fresno y el platanero. Otros utilizan material más económico: el boj, que es una madera que se astillaba y duraba poco.
Toda la madera para hacer los carros, normalmente la tenían tres años a la sombra, para secarla. EI fresno, cuanto más viejo, mejor era para los carros, por eso los buenos carreteros lo almacenaban.
El carretero pintaba los carros a mano, con pincel de pluma, largo, hacían la raya roja, y las filigranas verdes. Para pintar las ruedas se las hacia girar y el pintor sentado al frente pasaba el pincel.
Los colores dependían del carretero que los elegía a su gusto, podía distinguirse la obra de cada carretero por la decoración de sus carros. En Valls primaban el rojo y el amarillo. Los colores más utilizados en general  eran el rojo, el amarillo y el verde.


LOS CARRETEROS
Este oficio, como ya hemos reiterado, es tan antiguo como la civilización, aquí, solo podremos hablar de carreteros de los últimos tiempos, algunos de ellos incluso han perdurado hasta la actualidad, evolucionando su actividad hasta otras más acorde con las necesidades de su época.
Un ejemplo de ellos, actual firma Solé Diesel, proviene de un taller de carretería de Martorell del que hay constancia en 1912, posteriormente su labor pasó a la construcción de tractores, y en la actualidad su actividad está en los motores marinos y de grupos electrógenos.
También la actividad carrocera de  MACOSA tuvo sus orígenes en los carreteros y carroceros Hermanos Balcells que fusionaron su actividad con la Material del Sr.Girona.
Esta compañía fue absorbida a su vez por el grupo Alstom que actualmente construye ferrocarriles y tranvías para todo el mundo en sus instalaciones de Sta Perpetua.
Intentaremos a continuación enumerar los diversos carreteros que hemos encontrado en diversas publicaciones.
En  Roquetes, el Sr. Ventura Tarragó, con taller en la calle Major esquina calle de Pallarés fue un carretero muy popular. 
En Valls fueron carreteros: Los señores Arqué, Capellades (carretero y herrero), Badía, Bonet, Roca,  Joan Mateu  y Simonet. 
Josep Badía, con taller en la carretera de Montblanc, construyó carros hasta 1965. 
Los hermanos Reñé de Solivella, estaban  considerados como los mejores carreteros de aquella comarca (Conca de Barberà).


En varias  guías de entre 1841 y 1863 encontramos los siguientes talleres de carruajes.
En Barcelona:
En la calle del Carmen en 1841: José Aparicio, constructor de carros, en 1857 se había trasladado a la puerta del Angel.
En la calle de Santa Ana, Ramón Martí y Vicente Mata  entre 1841 y 1857
En la Plaza de Santa Ana, Carlos Gauran menor en 1841.
En la Explanada, Andrés Gauran, José Feliu, y Martín Cots, en 1841
Tras el derribo de las Murallas la zona de la explanada pasaría a ser Paseo de San Juan y en él se instalarían: Celedonio Trías, Pedro Suñol, Andrés Gauran, Juan Feliu, Martín Cot y Segismundo Gasull entre 1857 y1863.
En la puerta Nueva encontramos a los carreteros: Francisco Gasull, José Mestres, Clemente Riera y Francisco Sabat.
En la Rambla  de los Estudios entre 1841 y 1857: Jaime Nogués.
En la calle San Vicente tenía su taller Narciso Pascual en 1863.
En la Baja de San Pedro, Felipe Torrents en 1841 y Melchor Torrente en 1857
En al carretera del Port en 1863 están establecidos: Jacinto Amigó, Francisco Costa y Rafael Folch.
En la Cruz Cubierta estaba el taller de Narciso Pascual en 1863.
Finalmente indicaremos que en el Anuario Riera, aparece como taller de carruajes: la Compañía de tranvías de Barcelona a Sans, sita en la carretera de Barcelona,79 del entonces municipio de Sans.

En Madrid:
D. Genaro Félix,  obrador de coches. Atocha, 49, esquina á la de Cenicero. 
D. Agustín Marlin, Obrador y almacén de coches Fúcar, 5.
D. Federico Carsi, Taller de las Diligencias Postas Primitivas, Leche, 7
D. José Marlin—fabricante de toda clase de carruajes, Luna, 33.
D. Alfonso Rodríguez, constructor de toda clase de carruajes de lujo Santa Brígida, 3.
D. Casimiro Martín, Obrador de coches, Saúco, 10.
D. Julián Romero, constructor de toda clase de carruajes.
En Pamplona 
Fábrica de coches D. Juan Dueharlet, Taller de construcción de carruajes de todas clases, para paseo y viajes, diligencias, ómnibus, etc. Paseo de Valencia. 
En Valencia.
D. Julián Urgell y Ares  Plaza de S. Lorenzo, 3.
En Vitoria.
D. Justo Montoya. Vecindad de la Magdalena, 30. 

Posteriormente gracias a la publicación en la Hemeroteca Nacional Hispánica del Anuario Riera, podemos constatar los siguientes establecimientos relacionados con la carretería en Cataluña en 1896.

El resultado de contabilizar todos los profesionales de carretería que en ella aparecen,(seguramente su numero es mucho mayor). nos ha permitido hacer un pequeño censo de carreteros en las provincias Catalanas.

La toponimia corresponde a la del Anuario Riera de 1896

También el Bloc "HISTORIES DEL TRANSPORT PER CARRETERA" nos ha permitido ilustrar esta entrada con unas magníficas fotos y dibujos recogidos por el Sr. Maluquer. 


La actividad de los carreteros en las ciudades era compartida con la de carrocero, es decir constructor de carruajes, éstos tanto podían ser coches privados como vehículos de uso público como diligencias y ómnibus. Además en el sector industrial los carroceros, podían fabricar numerosos modelos de carruajes para transportes especializados, ya sean transporte de animales, mudanzas productos frescos etcétera.

Esta actividad fue evolucionando y tras la motorización del transporte algunos de ellos se convirtieron en carroceros de camiones y autobuses.